El sueño es indispensable, permite la recuperación de la fatiga física y nerviosa acumuladas durante la jornada, es por ello esencial para una buena calidad de vida y para el bienestar de nuestro cuerpo. El sueño es el factor que más contribuye a nuestro equilibrio. Privando al organismo de sueño a lo largo de un periodo más o menos largo, se pierde una parte de sus medios físicos e intelectuales.
Las principales causas de insomnio Además de una mala alimentación, una fatiga generalizada, la falta de ejercicio, etc., las causas pueden ser médicas: el hipotiroidismo (frecuente en las mujeres), la insuficiencia renal y la infección, así como la anemia, la depresión nerviosa, la diabetes. Otras enfermedades también pueden ser fuente de insomnio.
Las diferentes causas de insomnio:- Una alimentación mal equilibrada puede ser causa de insomnio.
- La depresión que se manifiesta muy a menudo por desvelos nocturnos, con la imposibilidad a veces de volver a conciliar el sueño. Además de los trastornos del sueño, aparece el malhumor, hay que hacer esfuerzo para hacer las cosas, incluso las actividades que gustan a uno habitualmente.
- La ansiedad que provoca también tanto dificultades para conciliar el sueño como desvelos por la noche. Va acompañada a menudo de signos físicos: transpiración excesiva, sensación de bola en la garganta, sensación de vértigo, boca seca...
- El estrés: determinadas situaciones profesionales o familiares generan una tensión penosa que desaparece en cuanto la persona puede cambiar de ambiente (ejemplo del sueño que mejora en las vacaciones para el estrés profesional).
- El insomnio psico-fisiológico, es un insomnio que afecta a las personas que se preocupan mucho por el sueño. Piensan en ello durante el día, la tarde, y temen acostarse. El hecho de meterse en la cama va acompañado a menudo de pensamientos negativos, tales como “no voy a poder dormir”, que conducen efectivamente a un fracaso del sueño. Es como si la persona se condicionara negativamente por lo que respecta al sueño.